Las autoridades están investigando un accidente mortal en el que se vieron implicados un autobús de pasajeros y una motocicleta ocurrido el domingo por la tarde a las afueras del Aeropuerto Internacional de Palm Beach.
Según la Oficina del Sheriff del Condado de Palm Beach, la colisión tuvo lugar cuando ambos vehículos se aproximaban a la intersección de Belvedere Road y North Congress Avenue. Al parecer, un autobús de pasajeros GMC, que viajaba en dirección oeste, intentó girar a la izquierda para entrar en el aeropuerto, cruzándose en el camino de una motocicleta que circulaba en dirección este. El motorista, Daniel Ducos, de 39 años, de Boynton Beach, golpeó el guardabarros trasero del autobús. Fue trasladado al St. Mary's Medical Center, donde más tarde fue declarado muerto. El informe del accidente señala que ambos vehículos tenían luz verde en el momento del incidente y que Ducos llevaba casco.
Cada vez que oigo hablar de un accidente en el que se ven implicados una motocicleta y un vehículo comercial en una intersección muy transitada, pienso en lo importante que es determinar si el conductor del autobús actuó con la debida precaución antes de girar a la izquierda. Según mi experiencia, este tipo de colisiones suelen reducirse al momento oportuno y a la conciencia del conductor, sobre todo cuando hay motocicletas implicadas.
¿Se equivocó el conductor del autobús al calcular la velocidad o la proximidad de la motocicleta?
Los accidentes de giro a la izquierda en los que se ven implicadas motocicletas suelen deberse a que los conductores comerciales subestiman la velocidad o la distancia de las motocicletas que circulan en sentido contrario. Incluso cuando ambas partes tienen luz verde, el vehículo que gira a la izquierda debe ceder el paso al tráfico que se aproxima. Los investigadores deben evaluar si el conductor tenía una visión clara y sin obstáculos de la motocicleta que se aproximaba y si la decisión de girar a la izquierda era razonable dadas las circunstancias.
¿Podría haber contribuido al accidente una distracción o un mal juicio?
También merece la pena investigar si el conductor del autobús estaba distraído en el momento del giro, ya fuera por los sistemas de comunicación a bordo, la navegación por la ruta u otra actividad en la cabina. Los conductores comerciales están entrenados para examinar minuciosamente las intersecciones y anticipar el comportamiento de los vehículos más pequeños y vulnerables, como las motocicletas. No juzgar correctamente la situación, aunque sólo sea por un momento, puede provocar un accidente grave.
¿Qué pruebas deben examinarse para comprender las acciones del conductor?
Para evaluar las causas del accidente, los investigadores deben revisar las grabaciones de la cámara del salpicadero del autobús, si se dispone de ellas, y comprobar si el autobús tenía algún sistema de control a bordo o un ECM que registrara la velocidad del conductor, su comportamiento al frenar o al girar el volante. La posición de los vehículos, el perfil de los daños y las pruebas físicas en el lugar de los hechos pueden ayudar a reconstruir la cronología. Además, los testimonios de los conductores o peatones que se encontraban cerca pueden ayudar a comprender la rapidez con la que se desarrollaron los acontecimientos.
Por qué las colisiones de vehículos comerciales requieren una revisión exhaustiva
Por mi experiencia, los accidentes en los que se ven implicados vehículos comerciales y motociclistas merecen un mayor escrutinio. Los conductores profesionales manejan vehículos grandes y pesados, a menudo con mucho tráfico y rodeados de vehículos más pequeños. Determinar si se actuó con la debida precaución en este caso es fundamental no sólo para exigir responsabilidades, sino también para dar respuestas a los afectados por el accidente.